En el pasado On The Edge se ha discutido sobre un tema tan importante como la necesidad de establecer un nuevo pacto social en España, conversación en la que formaron parte profesionales como Francisco Javier Gonzales, Pedro Navarro y Juan María Hernández.
En primer lugar, cabe comentar que hoy en día vivimos en un ambiente cada vez más inestable, tanto desde un punto de vista político como económico, y esto repercute en el hecho de que resultan fundamentales acciones en este sentido para poder liderar el cambio de forma flexible y al ritmo de un tiempo tan rápido.
Según los expertos, el pacto social es un acuerdo entre el Gobierno y los representantes patronales y sindicales para llevar a cabo una política económica concertada y controlar la subida de los salarios y la conflictividad laboral.
Para lograr dicho resultado, tal y como se comentó en el encuentro es fundamental la innovación en las Empresas, sobre todo a través de la digitalización. Además, resulta de incuestionable importancia que todas las acciones tengan el bienestar de los ciudadanos y del medio ambiente, a través de Empresas que desarrollan su negocio gracias a un capitalismo con propósito, y que tenga en cuenta aspectos tan relevantes como la sostenibilidad.
En segundo lugar, ya que lograr un pacto social podría requerir mucho tiempo, un aspecto interesante planteado durante el debate fue la posibilidad para el pueblo de establecer y emanar nuevas leyes, teniendo por lo tanto un instrumento democrático que favorezca un rápido conseguimiento de cambios a nivel social.
En definitiva, es necesario un pacto social que abogue todos los aspectos sociales, económicos y políticos, cambiando una estructura tan tradicional y fuera de nuestros tiempos, y dando vida a un pacto que vaya más allá de la mera actualización de las rentas públicas.
Al respecto, el nuevo contrato social debería tener en cuenta todas las transformaciones citadas y otros elementos que se han incorporado a las inquietudes del planeta en que vivimos, como por ejemplo el cambio climático. El objetivo del mismo debería condensarse en la extensión de la democracia en una doble finalidad: ampliar el perímetro de aquellos que participan en tomar las decisiones (ciudadanía civily política) y ampliar el ámbito de decisión a los derechos sociales y económicos (ciudadanía económica) que determinan el bienestar de la ciudadanía.